Capítulo 28: El peor recuerdo de Snape.

Luego de lo ocurrido, aparecieron carteles diciendo que la profesora Umbridge sustituiría a Dumbledore, como directora de Hogwarts.
Harry fue llevado al despacho de la profesora Umbridge. Ésta le ofreció algo de beber, para luego comenzar a interrogarlo sobre Dumbledore y Sirius. Harry fingió beber, ya que se dio cuenta de que el líquido contenía algo.
En eso se escuchó una explosión causada por los fuegos artificiales de Fred y George.
Esa noche Harry volvió a soñar con aquella puerta, pero esta vez la cruzó hasta llegar a una habitación llena de esferas brillantes.
Al otro día Harry discutió con Cho, ya que según ella, su amiga solo cometió un error y que Hermione no debió encantar la lista. Harry le dijo que estaba muy bien lo que había hecho Hermione, con lo que Cho se puso celosa y lo dejó nuevamente solo.
Cuando Harry fue a su clase de Oclumancia, el profesor Snape debía ir a ayudar a un alumno, así que Harry se quedó solo en la sala de Pociones y una luz llamó su atención. Esta luz prevenía del pensadero de Snape. Harry se sintió tentado y no pudo resistir mirar lo que había dentro.
Entre los recuerdos más importantes, estaba uno en el que el padre de Harry molestaba sin ningún motivo a Snape, y la madre de Harry defendía a Snape mientras insultaba a James, padre de Harry. Pero en eso Snape sacó a Harry del pensadero y le dijo que no lo quería ver nunca más ahí.
Harry salió rápidamente de la sala, se sentía realmente mal, porque se dio cuenta de que su padre era tan arrogante como Snape siempre le dio a entender.